Hoy os dejamos la entrada que ha escrito nuestra becaria alemana Birgit, alumna del Instituto de traducción e interpretación de Munich. El tema que ha querido abordar ella es el de la importancia de un traductor profesional frente a los traductores automáticos online. Esperamos que os guste, ¡y sobre todo que compartáis su opinión!
La pura verdad…
Todo el mundo habla hoy en día de la globalización y parece que no nos podemos escapar de este concepto. Y aunque es un término bastante controvertido, no se debería olvidar la ventaja de que nos acerca a otros países y que empezamos a aprender y hablar cada vez más idiomas. Y es verdad que nos sentimos muy internacionales si vemos nuestra serie favorita en inglés o porque hemos pasado un año en Inglaterra con el programa de Erasmus. No sorprende entonces que todos creamos que somos unos cracks en inglés.
Así que seguramente muchas personas se preguntarán por qué hacen falta todavía traductores en un mundo tan globalizado en el que todos hablamos inglés. De hecho un amigo me comentó recientemente que un día mi trabajo iba a ser redundante, que todo lo iban a hacer programas como Google Translator, Linguee y etc. Pero entonces todos los estudiantes de carreras de traducción perderían su tiempo y acabarían directamente en el paro, ¿o qué?
La verdad es otra: Los traductores hacemos falta, ¡y mucha! Una cosa es hablar un idioma y otra poder traducir un texto. Hay muchos matices al traducir que hay que tener en cuenta y que al final deciden si se trata de una traducción buena o mala. Y precisamente es esto lo que aprendemos en nuestra carrera, entre otras cosas.
Así que si un día necesitáis una traducción, no se la dejéis hacer al primer amigo que os diga que habla el idioma, sino ¡llamadnos! Porque la traducción podría acabar así: